Obra 67, kinkis de leyenda, manguis de segunda y perturbados
de libro.
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| Tesis 2.0 |
Las alegrías que está dando el otro cine español son
innegables. La intención de este blog era hacer críticas de los estrenos en
cartelera, por eso hasta ahora no había aparecido por aquí el proyecto
#littlesecretfilm, un manifiesto de cine independiente solo disponible online.
El empuje de
Calle13 ha permitido modificar un poco alguna norma y gracias a
esto,
David Sainz, el genio detrás de
Malviviendo, ha visto cómo media docena
de cines estrenaban momentáneamente su primer largometraje.
La trama nos cuenta cómo un famoso ladrón sale de la cárcel
tras veinte años. El Candela, que así se llama, tiene serios problemas por
adaptarse al mundo moderno, y más conviviendo con su hijo y un amigo de este,
dos perdedores que buscan pasta para empezar una carrera como raperos.
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| Vuelve el padre |
Antonio Dechent está recibiendo de manos de este joven
director sus mejores papeles. Aquí consigue un personaje peligroso, imponente y
desesperado, con una ruptura final que es digna de recordar. Pero es en los
interpretes no profesionales donde
David Sainz vuelve a demostrar que tiene un olfato fuera de lo normal, ya sea para saber rodearse, para dirigir o para lo que
sea.
Álvaro Pérez y
Jacinto Bobo están mejor que prácticamente todos los
profesionales patrios que hemos visto este año en cine y en televisión. Esto
pasa igual con los tipos que aparecen por
Malviviendo así que, o es el mismo
Sainz, o todos los sevillanos son excelentes intérpretes en potencia.
En su mayor parte,
Obra 67 son interminables conversaciones
de barrio de sus protagonistas. Como están rodadas con verdadero talento, es un
disfrute conocer las vidas de estos tipos, pero aun más sorprendente
es cuando todo cambia y una oscura tensión se apodera de la trama. Conseguir
esto teniendo en cuenta las imposiciones del proyecto es algo inaudito.
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| Pandi y Cerdi en acción |
Y es que ya toca decirlo, esta película está rodada en 13
horas por 13 únicas personas, incluido reparto y equipo técnico. Esa era la
imposición de
Calle13 para su producción que acortaba así las 24 horas
planteadas en
#littlesecretfilm. Otro de los apartados que se han respetado es
el de acreditar a los interpretes como guionistas ya que son estos los que
improvisan el diálogo. Esto quiere decir que el director trae el argumento y el
plan de rodaje junto con todas las ideas y tramas para sus personajes, pero son
estos los que deciden sus líneas sobre la marcha. Y con todo, es la mejor
película española del año.
Su estreno momentáneo me ha servido de excusa para traerla
aquí pero ya no está disponible. Eso sí, no tenéis excusa porque en
filmin la
tenéis por 0’95€. Y ya que estoy, además de insistir una vez más en la
necesidad de que sigáis cada proyecto de
David Sainz, echadle un ojo a los
#littlesecretfilm en general y a los que vengan firmados por
Pablo Maqueda en
particular.
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