A Cualquier Precio (At Any Price)

A Cualquier Precio (At Any Price), semillas, carreras y sonrisas falsas.

El granjero preocupado

Drama de campo con una extraña oscuridad perenne dirigido por Ramin Bahrani. Su película consigue grandes interpretaciones y sacar algo de jugo de donde parece que no lo hay, pero ahí se queda.

La trama, firmada por el director y Hallie Elizabeth Newton, nos cuenta cómo una familia que se dedica a vender semillas pasa por una crisis. La empresa está siendo investigada por unas irregularidades que ha denunciado algún vecino envidioso, el hijo menor es un rebelde que prefiere las carreras al negocio familiar y el mayor ha puesto tierra de por medio.

Dennis Quaid está sorprendentemente bien. Su cara, a medio camino entre la vejez y la transformación en muñeco de cera, consigue perturbar aun más este cuento oscuro. Zac Efron ha pasado de ser niño Disney a elegir todas las películas raras que puede. Maika Monroe merece más tiempo en pantalla y Clancy Brown una película para él haciendo lo que quiera pero claro, eso ya es problema mío. En cuanto al personaje de Heather Graham, simple relleno que no va a ninguna parte.

EL chulo del lugar

Lo más destacable de la película es su choque entre forma y fondo. Está rodada como el típico pastel que no apetece pero que dejas en la tele para digerir la comida mientras duermes. Por eso sorprende que la historia poco a poco se torne más incómoda hasta que todo el mundo tenga que mentir, llegando así a un final duro que terminó por convencerme.

No es una película que pueda recomendar, ni siquiera creo que vuelva a verla, pero mentiría si no reconociese que tiene algo, un toque podrido del que no puedo evitar sentirme atraído. Qué razón tenía Jennifer Lawrence en La Gran Estafa Americana.

¿Qué le pasa a tu cara Dennis?

Aquí el trailer. Sé que las idas y vueltas hacen que esta crítica sea demasiado ambigua pero, es lo que hay. Un 6’0.