Nuestro último verano en Escocia (What We Did on Our Holiday)

Nuestro último verano en Escocia (What We Did on Our Holiday), no hay nada que no arreglen las Highlands.

También hay playas en Escocia

Comedia ligerita, o eso parece en un primer momento, escrita y dirigida por Andy Hamilton y Guy Jenkin, dos tipos afincados en la pequeña pantalla que dan el salto. Puede que por eso la fotografía de esta película combine un aspecto tan natural en interiores, cercana y simplona, como desmesurada en los paisajes en los que paladea cuanto puede. Las ganas que tenían de algo más grande se notan en cada panorámica verde.

La trama nos presenta a dos padres que están pasando por un momento complicado. Han terminado viviendo separados pero el cumpleaños del abuelo, posiblemente el último, es la excusa perfecta para juntarse en un viaje hasta Escocia, niños incluidos. Allí las cosas dan un vuelco cuando los adultos parecen meterse cada vez en más discusiones mientras los pequeños consiguen un paréntesis con el yayo molón.

Aunque todos están bien, no esperaba menos de Rosamund Pike, y no me atrevería a decir otra cosa de David Tennant con tanto whovian suelto, son los tres enanos los que se comen la película, tanto cuando comparten pantalla con el siempre acertado Billy Connolly como cuando están sueltos. No sé que será en el futuro de Emilia Jones, Bobby Smalldridge y Harriet Turnbull, pero con lo que nos dan aquí yo ya estoy satisfecho.

El tono de la película varía según el momento, desde el más edulcorado, especialmente en los momentos dramáticos, hasta un enfoque ácido, e incluso negro, cuando le viene en gana. Esto obliga a estar atento y a sorprende en cada giro de los acontecimientos. No es que invente nada, pero su sinceridad y buena intención funcionan sin caer en lo vulgar, ofreciendo una buena experiencia para cualquiera.

Pasando el rato

Aquí el trailer. Comparada con Pequeña Miss Sunshine, aunque puede que más simple, el tono blanco pero realista también me recordó a la disfrutable #Chef. Un 7'5.