24/4/16

El recuerdo de Marnie (Omoide no Mânî)

'El recuerdo de Marnie', niños tristes para niños de todo tipo.


Studio Ghibli entra en pausa, al menos hasta que sepan cómo continuar tras el retiro de sus dos pilares fundamentales. En su despedida, estrena tres obras muy diferentes que definen muy bien la grandeza de uno de las productoras de animación más lúcidas que hayan existido nunca.

Empezaron con 'El viento se levanta', dramático biopic que cerraba también la carrera del alma mater del estudio, Hayao Miyazaki.

Luego llegaría 'El cuento de la princesa Kaguya', nueva genialidad de Isao Takaha que mezclaba tanto técnicas como relatos y tonos.

La despedida final viene de la mano de uno de los secundarios, Hiromasa Yonebayashi, que ya se había encargado de 'Arriety y el mundo de los diminutos' y ahora le tocaba cerrar la puerta hasta la esperada reapertura.

'El recuerdo de Marnie' es dura, pero nunca descorazonadora. Habla de la pena de una niña, pero lo hace de tal modo que no cierra la película únicamente al público adulto, si no que permite que alguien de la edad de la protagonista pueda disfrutar de sus aventuras, ya sean más o menos agradables.

Como todo producto de la marca, uno de sus mayores logros es no subestimar nunca a los pequeños de la casa, logrando un cuenta que no resulta complejo para nadie pero, a la vez, es tan coherente y adulto como cualquier otra historia sin pretensiones infantiles.

Por otro lado, no consigue remover lo que sí lograron otros títulos de la casa, haciendo que baje posiciones en un ranking complicado gracias a la cantidad de maravillas que contiene.


No hay comentarios:

Publicar un comentario