Hoy he visto
Oz, un Mundo de Fantasía (Oz the Great and Powerful), una de tirar de viejas ideas y llenarse la cartera.
 |
Cartel tan sobrecargado como la peli |
Debo reconocer que esperaba bastante menos de esta película.
Cada tráiler de
Oz, un Mundo de Fantasía me recordaba a esa orgía de CGI y cromas sin alma ni sentido que fue
Alicia en el País de las Maravillas de
Tim Burton. Los remakes de clásicos a base de fondos digitales no parecen un género
del que se pueda sacar mucho pero, pese a lo que nos quejemos los críticos, hay
que reconocer que arrasan en pantalla.
Supongo que eso es lo que necesitaba
Sam Raimi. Tras dejar
atrás la franquicia del
trepamuros, el director volvió a su querido terror con
Arrástrame al Infierno. Si ahora ha decidido filmar este sacapastas de
Disney,
supongo que es de los que se ha apuntado a la inteligente técnica de alternar
encargos monetarios con proyectos personales. Puede que gracias al éxito de
Oz, un Mundo de Fantasía, y aprovechando el
remake de
Posesión Infernal,
pueda continuar su saga más mítica y atreverse con
Evil Dead 4. Pero vamos con
la peli que me estoy enrollando.
 |
El monete, la muñeca y el fumado |
La trama nos cuenta como Oz, un engreído ilusionista de una
feria de mala muerte, es arrastrado por un tornado y llevado a un mundo
fantástico con el que comparte nombre. Una bruja muy maja llamada Theodora le
contará que una profecía advertía de su llegada y de cómo el poderoso mago
terminaría con su malvada hermana Glinda. Desde ese momento vivirán muchas
aventuras muy locas, con muchos colores y monos con alitas.
 |
Mila y su sombrerazo |
James Franco es el prota pero parece que no se ha enterado de
que ya no está en
Superfumados. Los ojos achinados y el semblante de “vale tio,
vamos pa’lante” no le venía demasiado bien a este personaje que debe ser
chulesco, engreído y egoísta para finalmente descubrir su bondad interior. Es una
pena que el primer actor tentado con este papel dijese que no, y es que
Robert Downey Jr. ya consiguió interpretar con éxito un rol similar. Supongo que su negativa se debió a que meterse
en otra franquicia teniendo dos abiertas,
Iron Man/
Los Vengadores y
Sherlock Holmes, parecía demasiado.
 |
La buenaza |
Las tres brujas son lo mejor de la película, especialmente
Mila Kunis que tiene el papel más interesante y sabe hacer como nadie de
buenaza tontorrona, mujer despechada y malvada con la cara verde. Las
cicatrices de sus lágrimas en la cara y la conversión a espanto esmeralda es
absolutamente refrescante en una película que no sorprende pese a su exagerada
puesta en escena.
Michelle Williams no ha tenido tanta suerte porque ya se sabe que los personajes totalmente blancos son un rollo. Por eso
Rachel Weisz peleó por quedarse con Evanora, la otra villana que si bien no llega
al nivel de
Charlize Theron en el truñete de
Blancanieves y la Leyenda del Cazador, sí tiene su momento de gloria.
 |
Domina los poderes de los Sith |
Zach Braff tiene una divertida intervención como ayudante del mago en
el prólogo y luego pasa a ser la voz del monete que sirve para entretener a la
chavalada.
Bill Cobbs,
Tony Cox y
Joey King son otros de los personajes más o
menos estrafalarios que pueblan Oz.
No se puede comparar esta película con lo que supuso
El Mago de Oz. Por eso, y porque
Warner tiene los derechos de la del 39,
Disney ha
optado por narrar acontecimientos anteriores a los más conocidos de la obra de
L. Frank Baum. Pese a no poder usar elementos y personajes del clásico de
MGM
como los zapatos rojos o el trio de protas locuelos, no han dudado en dejar el
mundo tal cual se lo encuentra Dorothy, con el mago preparando sus trucos
audiovisuales y las brujas tal y como las esperábamos.
 |
Muy verde |
Aun así las comparaciones son inevitables así que, para que
esta crítica fuese lo más completa posible, acudí al cine con una auténtica
fanática de la obra original, mi abuela. Su conclusión fue clara, aquí no hay
canciones. Yo agradecí este hecho pero parece que a la experta, la banda sonora
de
Danny Elfman le supo a poco. Tampoco le gustó la ausencia del perrito, el mono no convenció, y echó en falta el mensaje de la original: como en
casa en ningún sitio.
Dicho esto, si alguien tiene alguna pregunta que no dude en
escribirla aquí abajo y yo me encargo de que mi abuela, la que de verdad sabe de todo
esto, os responda. Personalmente me quedo con el genial prólogo en blanco y
negro y con
Mila Kunis que me gusta todo el rato.
 |
¡Colores! |
No hay comentarios:
Publicar un comentario