Marte (The Martian)

Marte (The Martian), los problemillas de dejarse a un tipo en otro planeta.

Que le gusta a Damon darse paseos por planetas

Dice Andy Weir que cuando estaba escribiendo su ahora exitoso best seller, fantaseó en algún momento con que fuese llevado al cine. De hecho, se permitió la licencia de bromear en las últimas páginas sobre cómo Hollywood mostraría esos duros momentos. De soñar despierto, el bueno de Weir a pasado a bromear en convenciones al lado de Matt Damon y Ridley Scott.

Con un guión de Drew Goddard, al que me hubiese gustado ver defendiendo la dirección, el equipo de Scott adapta la novela sin cambios importantes, dejando que sean los recortes los que empasten la historia de un medio a otro. Esto es mucho menos dañino para el lector, que agradece que se respete lo que ya conoce y que sólo tendrá de sufrir un incomprensible mal trago en el último minuto del clímax final.

Para el que no se haya leído El marciano y, con total criterio, haya conseguido esquivar los explícitos trailer de Marte, la trama nos presenta a un astronauta que se encuentra con su equipo de expertos en el planeta rojo cuando son sorprendidos por una tormenta. Tras un aparatoso accidente, sus compañeros le dan por muerto y emprenden el viaje de regreso a casa mientras el pobre Mark Watney, que así se llama, hace lo que puede por sobrevivir hasta que alguien vuelva a por él.

Los colegas que le dan plantón

Lo que más gusta de la novela es el motivo principal por el que el protagonista logra seguir adelante día tras día. No se debe sólo a su condición de Ingeniero mecánico y Botánico titulado, que también, si no a que el tipo es un nihilista irónico hasta la médula y tiene un sentido del humor hiperdesarrollado. La versión que Matt Damon logra de esto es algo descafeinada pero, de nuevo, funciona en pantalla. Encontrar el equilibrio entre mostrar las dificultades por las que pasa y trasladar ese sentido del humor el complicado, por eso entiendo que esté rebajado pero aplaudo la valentía de mantener su carácter hasta donde el guión lo permitía.

El resto del reparto está plagado de caras conocidas que se reparten entre miembros de la NASA en tierra y los apesadumbrados compañeros de tripulación del pobre marciano del título. Jessica Chastain, Kristen Wiig, Jeff Daniels, Michael Peña, Sean Bean, Kate Mara y Chiwetel Ejiofor son los nombres más importantes de un reparto coral que ayuda a acelerar el tempo fuera de Marte y que logra esa sensación de mostrar la cantidad de gente involucrada en una sola tarea. Además también sirve para recordar que, por mucho que últimamente sólo demos palos al director de Blade Runner, si Scott te llama, vas.

Con una cuidada puesta en escena gracias a paisajes tunecinos tuneados con CGI, consiguen trasladarnos a otro planeta. La parte humana, el instrumental, equipo y vehículos, mezclan ideas ya asimiladas por el realizador con diseños realistas prestados por la propia NASA.

Una aventura divertida, optimista, trabajada y bienintencionada que logra lo que pretende y sirve como aliciente para los reacios a coger un libro: si disfrutáis de la peli, os encantará la versión extendida impresa.

Ay la patatita, qué rica patatita

Aquí el trailer. En tres años nos ha salido una trilogía espacial de lo más currada y variopinta con Gravity, Interstellar y Marte. Un 8.