10/10/14

Sitges día 7: las películas

Séptima jornada en Sitges donde se ha notado la resaca de la cinefágia de ayer. No es que me haya quedado en casa, pero ha costado coger el ritmo y no sucumbir en la butaca.

El sopor
El Ardor [Secció Oficial Fantàstic Especials] es una producción argentina escrita y dirigida por Pablo Fendrik y con Gael García Bernal como cabeza de cartel. Todas las reseñas y textos promocionales evitaban hablar de la trama y se empeñaban a subrayar lo mismo, que era un western a lo Leone pero en la selva. Esto quiere decir que la película no cuenta prácticamente nada y que su ritmo tedioso y planos infinitos intentan vender la moto de profundidad emocional. Dejad a Leone descansar en paz que para rodar contraplanos de gente en silencio, hace falta mucho más que colocar un trípode y darle a grabar. El argumento cuenta cómo un joven protege a una chica y su granja de unos malutos. Y ya está. El intento por ser lo que no se puede ser, llega a ofrecer chorradas tan grandes como poner al protagonista un disfraz de vaquero en la escena final cuando lleva toda la película sudando sin camiseta por la jungla. Aburrida, lenta e insustancial, sus interesantes quince minutos finales podrían ser un buen corto pero, aun así, no sé qué pinta esto en un festival de género. Trailer.

Se quieren
Alleluia [Secció Oficial Fantàstic 47] es otra de esas que está aquí por los pelos. Hasta la mitad, justo a los cuarenta y cinco minutos, no sucede algo que podría significar Sitges. Desde ese momento, el espectador se engancha a la cinta de una nueva forma pero tras dos repeticiones de estructura, volvemos a quedarnos en nada. Escrita y dirigida por Fabrice Du Welz, esta producción belga está protagonizada por un decente Laurent Lucas y una espléndida Lola Dueñas. La española disfruta con este trabajo, se nota y llega al público consiguiendo que sea partícipe de todo. Pese a su difícil comienzo y la falta de gancho tras la sorpresa, el empuje de la protagonista casi obliga a pensar que la cinta te está gustando más de lo que luego descubres. Deudora del terror oscuro y humano europeo de los setenta, Alleluia gusta más por lo que pretende ser que por lo que realmente consigue. Tiene un momento canción del que no sé que pensar pero creo que me vale. Trailer.

Mindfuck en tu cara
R100 [Secció Oficial Fantàstic 47] es la nueva película de Hitoshi Matsumoto. El que conozca alguna de las obras anteriores del japonés sabrá que todo lo que escriba a continuación es inútil. La trama nos presenta a un hombre aburrido y rutinario que intenta criar a su hijo tras la entrada en coma de su mujer. Desesperado por el tedio y empujado no se sabe muy bien por qué deseos, contrata los servicios de una empresa muy exclusiva. Desde ese momento, en cualquier momento se puede topar con una Reina, mujeres vestidas de cuero que, a base de golpes, consiguen sacarle una sonrisa de gozo muy loca. Cuando las trabajadoras del dolor empiezan a aparecer en el trabajo y en su casa, el hombre intentará rescindir el contrato pero no será fácil. A parte de esto, hay un grupo de personas viendo la película con los espectadores y comentando los errores e imposibles de la trama, tan extrañados como el público real. La locura y el nonsense en su máximo esplendor, adelantando por la derecha a todo Sitges en el terreno del mindfuck. El problema es que a su lado está Réalité de Dupieux y habrá que pedir foto finish. Una locura ideal para el que disfrute con estos imposibles, que en la sala éramos todos. Trailer.

Muy rica
Eat [Midnight X-Treme] fue la encargada de abrir la maratón macarra nocturna del día, esta vez dedicada al canibalismo. Este primer escalón está escrito, dirigido, montado y casi todo lo demás por Jimmy Weber. La trama presenta a una aspirante a actriz que se pasea por Los Angeles buscando una oportunidad. Sin un duro y viendose en la calle, se pone muy nerviosa, tanto que empieza a morderse el brazo hasta que se come un buen trozo del mismo. Tras su paso por el hospital, conocerá a un psicólogo muy majo que le dará cierta estabilidad pero no eliminará sus ansias por comerse entera. Divertida chorrada con momentos gore muy conseguidos, lo que realmente hace más cuesta arriba su visionado es el acabado casero de las escenas del día a día, como esa discoteca sin ambiente y secundarios que no ocultan ser colegas del director haciendo un favor. Funciona si la ves así, en Sitges, muy tarde, con gente con ganas de sangre. Lo malo es que no se me ocurre otra situación donde vuelva a ser útil que se proyecte o reproduzca. Trailer.

No está el horno pa' bollos
Gravy [Midnight X-Treme] vino después, escrita y dirigida por James Roday y con un acabado técnico más conseguido que la anterior. Lo curioso es que pese a esto y ser también más interesante argumentalmente, el ritmo repetitivo y entrecortado hicieron su proyección bastante más pesada. Cuenta cómo un trío de villanos muy locos secuestran a los responsables de un restaurante para comerselos en complejas recetas. Durante esa noche veremos cómo van luchando por su vida y muriendo que formas divertidas. Es una comedia gamberra con buenos momentos separados por secciones más aburridas. Sorprenden algunas interpretaciones, como la de Lily Cole por la que no daba un duro, y la composición de algún plano digno de aplaudir. También es verdad que un payaso herido y corriendo con un hacha es molón sí o sí. Tiene un prólogo y un epílogo con Sarah Silverman y eso también podría ser excusa suficiente para echarle un ojo. Trailer.

Después se proyectó American Burger para terminar la maratón pero yo me di de baja. Lo que sí vale la pena señalar es que, durante esta jornada, se han podido ver también la genial Relatos Salvajes y la más floja Autómata, de las que ya hice crítica en San Sebastian y a las que podéis acceder pinchando en el enlace. No os lo puedo poner más fácil. Si queréis más chorradas ya sabéis que estarán en Sitges día 7: lo otro y si no, pues muy bien oiga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario